Las Mujeres Privadas de Libertad ahora cuentan con instalaciones renovadas, cómodas y dignas, pensadas para mejorar su calidad de vida dentro del sistema penitenciario.

La reconstrucción comenzó desde la fachada del establecimiento, renovando su imagen para reflejar dignidad, respeto y esperanza. Este es el primer paso visible de un proceso profundo que impacta cada rincón del centro.

Pero eso no es todo: el Módulo de Casa Cuna, fue completamente reconstruido para brindar a los menores espacios adecuados, con mobiliario y dormitorios diseñados para su bienestar y seguridad.

En materia de seguridad, la PNFAS implementa tecnología de punta con la llegada del Body Scanner, una herramienta innovadora que garantiza un control más efectivo y seguro de todas las personas que ingresan a la penitenciaría, protegiendo a la comunidad y a las internas.

Además, se instaló un nuevo sistema eléctrico que cubre toda la estructura, asegurando un funcionamiento óptimo y confiable de las instalaciones.

Estas mejoras forman parte de la gran Reestructuración del Sistema Penitenciario Nacional, un compromiso firme para dignificar y transformar las condiciones de la población penitenciaria, apostando por un futuro más humano y seguro.