Cumpliendo con las instrucciones de la Comisión Interventora del Instituto Nacional Penitenciario, el director del establecimiento dirigió una operación de requisa en la cual se inspeccionó los dormitorios de uno de los módulos en que conviven las personas privadas de libertad, baños, patios, techo, paredes, piso, entre otros espacios.
La acción preventiva, tiene como finalidad la extracción de objetos y sustancias de uso prohibido para las personas privadas de libertad, generando así un ambiente se seguridad, tranquilidad y sana convivencia para los internos.
En las instrucciones dadas por las máximas autoridades penitenciarias se encuentra la de entregar a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), todos los indicios decomisados para que se haga la investigación correspondiente.