Mediante un patrullaje a pie, agentes penitenciarios asignados a la seguridad del establecimiento encontraron un paquete envuelto en cinta adhesiva transparente conteniendo al menos una libra de supuesta marihuana.
En el informe, se establece que la droga fue lanzada desde el lado oeste del establecimiento con la finalidad de que alguien la recogiera y la ingresará al recinto. Cumpliendo con las instrucciones giradas por la Comisión Interventora del Instituto Nacional Penitenciario, la droga fue puesta a la orden de la Dirección Policial de Investigaciones.
Entre las ordenes giradas por las máximas autoridades penitenciarias se encuentra, la realización de patrullas a pie, en el perímetro interno y externo del centro penitenciario para descartar cualquier situación que represente un riesgo y también evitar intentos de fuga.